¿Alguna vez has oído hablar de una tina de hielo? Muchísimo agua realmente, REALMENTE fría junto con hielo. Esto podría parecer un poco loco ya que el agua es tan fría, pero hay muchos beneficios que pueden surgir de sentarte en un baño de hielo. Así que pensé que deberíamos profundizar más en por qué las tinas de hielo son tan increíblemente buenas.
Otro beneficio de sentarte en una tina de hielo es que puede ayudar a que tus músculos se recuperen más rápido después de hacer ejercicio. A veces, cuando hacemos ejercicio — como correr o jugar deportes — nuestros músculos desarrollan pequeñas roturas. Estas microlesiones pueden dejar nuestros músculos sintiéndose adoloridos e hinchados. Sentarte en una tina de hielo ayudará a aliviar esta sensación de dolor e inflamación, para que puedas comenzar a recuperarte más rápidamente. Es como darle a tus músculos una nueva oportunidad de vida.
Historia corta, un baño de hielo puede ayudarte a sentirte más vivo y un paso más cerca de comenzar el día. ¿Sabes cómo cuando te sumerges en una piscina helada en un día caluroso de verano? Aunque esto puede sorprenderte la primera vez, generalmente te deja sintiéndote muy enfocado y despierto después. Esto también puede ocurrir si usas una tina de hielo. A pesar de la incomodidad inicial, en segundos puede ayudarte a sentirte más despierto y alerta.
¿Tomar un baño de hielo después de un entrenamiento con recuperación activa? ¿Aún puedes sentir esas pequeñas roturas en tus músculos, verdad? Esta podría ser una fuente de dolor e incomodidad. Tomando un baño de hielo, puedes limitar ese dolor y hacer que tus músculos se recuperen 10-20 veces más rápido. Eso significa que puedes volver a las actividades que disfrutas mucho antes.
Después del ejercicio, el baño de hielo es lo mejor. Otro truco útil es sumergirse en una bañera llena de agua fría y hielo; 10-15 minutos deberían ser suficientes. Esto también es una buena idea después de un juego o competencia intensa, ya que reducirá el tiempo que tu cuerpo necesita para recuperarse y sentirse normal.
Un dicho más conocido entre los atletas es que entender que entrenar duro es importante, pero que la recuperación es igualmente beneficiosa para un atleta. Cuando no permites que tu cuerpo se recupere adecuadamente después de un entrenamiento difícil, esto podría afectar tu rendimiento. Así que, un baño de hielo realmente puede hacerte un mejor atleta.
El agua fría contrae tus vasos sanguíneos, así que cuando te sientas en agua fría, esas venas se aprietan y se encogen. Esto ayuda a reducir la hinchazón e inflamación en tus músculos. Luego, cuando sales de la tina y tus vasos sanguíneos se abren nuevamente. Esto se llama vasodilatación, y trae oxígeno de sangre nueva a tus músculos. Con un mayor flujo llega un retorno más rápido al equilibrio y a la función normal, permitiéndoles sanar aún más rápido para que te sientas mejor antes.